Populismo en Italia es la llave que abre la escena política frente a las elecciones del domingo. Los que siguen el proceso electoral ya hablan del surgimiento de un nuevo tipo de populismo. El movimiento 5 estrellas, liderado por Matteo Salvini, está a punto de ser el partido más grande del país después del domingo.
En octubre pasado, Beppe Grillo encabezó una protesta del Movimiento 5 estrellas, el partido político populista que fundó. Grillo, que se hizo famoso como comediante, lució una venda blanca. «Estamos protestando con los ojos vendados porque así es como nos quieren a nosotros. Incapaces de ver», dijo. «Solo aprueban reglas que los protegen».
El dilema populista
El Movimiento 5 estrellas estalló en Italia después que una débil recuperación económica no ha logrado brindar alivio. Y se alimenta con la ira popular frente a la corrupción y la ineficacia de la clase política de Italia. Las encuestas muestran que 5 estrellas podría emerger de la votación del domingo como el mayor beneficiado. Esto lo pondría por primera vez en posición de ser el socio principal de un gobierno de coalición. O de formar una oposición aún más poderosa.
Los grupos populistas en Europa han prosperado con la creciente ira sobre la inmigración y la Unión Europea. 5 estrellas representa una variedad exclusivamente italiana. Y es una abrumadora rebelión contra la clase política atrincherada de Italia. El resto de su programa es ecléctico. Toman prestado de la izquierda, de la derecha y hasta del utopismo tecnológico. Tiene puntos de vista centristas sobre inmigración. Y, aunque una vez estuvo a favor de la salida de Italia de la eurozona, sus líderes dicen que ya no es hora de abandonar la moneda común.
Es probable que la elección provoque una pregunta que podría obligar a 5 estrellas a definir su futuro, y potencialmente la de Italia. ¿Es una fuerza de gobierno o simplemente un movimiento de protesta?
Esta respuesta parece recién estar comenzando.
