Argentina, gobierno kirchnerista se une a Venezuela. El gobierno kirchnerista de Argentina pide «restablecer lazos» con la dictadura de Maduro en Venezuela, señal de desvarío.
Argentina gobierno kirchnerista Venezuela
la realidad en Argentina no deja de sorprender mientras la decadencia es moneda corriente en el país vecino. La línea dura de la oposición, los grupos de derechos humanos y el legislador estadounidense Marco Rubio criticaron duramente al presidente Alberto Fernández, después que el gobierno kirchnerista anunciara que quiere que Argentina restablezca relaciones diplomáticas con Venezuela.
“Como primer paso, Argentina quiere recuperar sus vínculos diplomáticos completos. Es un paso que estamos dando, y realmente hago un llamado a todos los países latinoamericanos para que lo revisen, porque Venezuela ha pasado por un momento difícil”, dijo Fernández.
El líder peronista argumentó que los esfuerzos diplomáticos anteriores, incluido el aislamiento del gobierno de Maduro, no habían mejorado la suerte de los venezolanos. El líder argentino también sugirió que los problemas de derechos humanos en el país azotado por la crisis «se han ido disipando».
Las relaciones entre Argentina y Venezuela se encuentran actualmente a nivel de encargados de negocios, aunque Fernández indicó el lunes que estaba dispuesto a acordar nuevamente un intercambio de embajadores.
Guaidó
Bajo el expresidente Mauricio Macri, Argentina se unió al Grupo de Naciones de Lima en 2017 y reconoció, junto con otros 50 gobiernos, al líder opositor Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela luego de resultados electorales cuestionados.
Durante el gobierno de Fernández, Argentina ha apoyado los informes críticos de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, que detalla presuntos abusos contra los derechos humanos en Venezuela a pesar de que se retiró del Grupo de Lima, una entidad que casi ha dejado de operar.
Guaidó respondió con dureza a la propuesta, dirigiendo sus críticas al líder argentino directamente en Twitter.
“Presidente Fernández: si quiere ayudar a Venezuela, exíjanos con nosotros elecciones libres y justas, con las condiciones establecidas en el reciente informe de la Unión Europea, y exija justicia para las víctimas de violaciones de derechos humanos como lo afirma la ONU y la Corte Penal Internacional (CPI)», dijo.
“Negar la dictadura no ayuda a los venezolanos”, agregó, argumentando que tales actitudes “revictimizan a millones de migrantes y refugiados, miles de víctimas de crímenes de lesa humanidad y a toda una sociedad que resiste”.
Los líderes opositores Julio Borges (Primera Justicia) y Leopoldo López (Voluntad Popular) también criticaron la propuesta, y este último advirtió que restablecer los lazos «normalizaría una dictadura corrupta, asesina y narcotraficante».
Borges dijo que la situación de los derechos humanos en Venezuela está “lejos de mejorar, prueba de ello es que se abrió una investigación por parte de la CPI para esclarecer la verdad sobre los crímenes de la dictadura”.
La enviada de Guaidó en Buenos Aires, Elisa Trotta Gamus, dijo que los comentarios eran «muy preocupantes» y «afirmaciones que están muy lejos de la realidad».