Brasil, BYD presenta primer vehículo eléctrico. Luego de inicio de año complejo BYD Brasil inició producción en su planta de Camaçari del primer vehículo eléctrico saliendo de línea de ensamblaje.
Brasil BYD vehículo
BYD inició la producción en su planta de Camaçari, con el primer vehículo eléctrico saliendo de la línea de ensamblaje el 1 de julio.
El Dolphin Mini, el primer vehículo en salir de la línea de producción en Brasil, es también el único vehículo totalmente eléctrico planificado para la fase inicial de producción.
Conocido como Seagull en China y Dolphin Surf en Europa, este pequeño hatchback de cinco puertas tiene un precio inicial de 118.800 reales (US$21.960), lo que lo convierte en uno de los vehículos eléctricos más asequibles de Brasil.
La fase de producción inicial también incluirá dos PHEV: el Song Pro, un SUV crossover compacto, y el King, un sedán compacto comercializado como Destroyer en China.
Por ahora, la planta de Camaçari operará bajo el sistema semi-knock-down (SKD), un enfoque en el que el vehículo se desmonta parcialmente en China y componentes importantes como la carrocería, el motor y la batería se envían a Brasil para su ensamblaje local.
BYD afirma que impulsará una mayor localización de la producción a medida que avance, incluyendo el estampado, la soldadura, la pintura y los componentes periféricos locales. La empresa se asoció recientemente con Continental, por ejemplo, que se espera que suministre neumáticos fabricados en Brasil.
El fabricante de neumáticos, que también opera en Camaçari, puede ser el primer acuerdo, pero es solo una de las más de 100 empresas brasileñas que cumplen los requisitos para suministrar piezas a BYD.
El enfoque SKD puede haber ayudado a BYD a adelantar su fecha de lanzamiento, retrasada por una investigación en curso sobre abuso laboral que ralentizó la construcción, pero no hace nada para escapar de los crecientes aranceles , uno de los principales impulsores del cambio de BYD de las importaciones a la fabricación nacional.
Vehículos eléctricos
La apertura el 1 de julio coincidió con un aumento en las importaciones de vehículos totalmente eléctricos, del 18 % al 25 %, y de los PHEV, que aumentaron del 20 % al 28 %. Los aranceles para los vehículos SKD semidesmontados son idénticos a los de sus homólogos completamente ensamblados, aunque BYD solicita una reducción del 10 % para sus vehículos semidesmontados.
La compañía aún no ha recibido respuesta del gobierno, según el medio brasileño Autoo.
La planta de Camaçari emplea actualmente a más de 1.000 trabajadores, con más de 400 brasileños contratados en las últimas semanas. Durante la inauguración, BYD anunció la apertura de 3.000 vacantes adicionales que se cubrirán hasta finales de año, desde ingenieros hasta guardias de seguridad y profesionales de logística.
La empresa espera que la planta de Camaçari genere hasta 20.000 empleos directos e indirectos gracias a su mayor dependencia de proveedores brasileños. BYD también está desarrollando un motor híbrido flex-fuel en colaboración con científicos brasileños, creando un vehículo puente a medida del segundo mayor productor mundial de etanol, mientras desarrolla su infraestructura para vehículos eléctricos.
