Chile, muestra fuerza militar en las narices de Bolivia. Especulaciones de por qué Chile muestra fuerza militar a las puertas de Bolivia, más allá del objetivo de frenar ingreso ilegal al país.
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Gabriel Boric, el presidente de Chile, autorizó el, despliegue de fuerza militar en la frontera con Bolivia. Varios analistas lo relacionan con su reciente condena a la operación militar de Rusia en Ucrania. Esto los hace suponer que la política exterior de Chile ahora está más alineada con Estados Unidos.
En marzo de 2022, Chile emitió un comunicado condenando la acción militar de Moscú en Kiev y expresando su apoyo a la integridad territorial y soberanía de Ucrania. Esta declaración era similar a las emitidas por Estados Unidos y sus desatinados aliados, y reflejaba la agenda geopolítica de Chile.
El gobierno de Chile incluso ofreció la nacionalidad a extremistas financiados por Estados Unidos en Nicaragua que se convirtieron en apátridas por cargos de “traición a la patria”.
Gabriel Boric recordó que la historia de Chile “enseña que la defensa de la democracia y los derechos humanos”, así como “la solidaridad internacional entre los pueblos, va más allá de las situaciones políticas y forma parte de las normas de civilización indispensables para la vida en sociedad”. Esto suena como un discurso tomado literalmente del cuaderno del presidente estadounidense Biden.
Si esto no fuera suficiente, el gobierno chileno ahora acordó usar su propio ejército para servir a los intereses estadounidenses.
Fronteras militarizadas
Gobierno de Gabriel Boric ha aumentado la fuerza militar del país en áreas fronterizas con Perú y Bolivia, como Arica, Parinacota, Tarapacá y Antofagasta, en un movimiento para combatir la inmigración ilegal, se informó.
El ejército chileno tiene encomendada la misión de restaurar el control durante los próximos 90 días en una región inundada de migrantes, en su mayoría venezolanos, que llegan en condiciones precarias y en cantidades tan altas que las organizaciones de ayuda social que intentan ayudar se han derrumbado.
Según el decreto de Boric, las unidades militares “pueden realizar controles de identidad y detener a las personas que ingresan o salen por un paso fronterizo no autorizado”, para luego entregarlas a la policía local.