Colombia, sistema nacional de salud en crisis. En Colombia una de las aseguradoras más grandes solicita salir del sistema nacional de salud, en grave crisis por idea de Petro.
Colombia salud crisis
Una de las compañías de seguros de salud más grandes de Colombia, Sura anunció que solicitó ser retirada del sistema nacional de salud en medio de una crisis inédita.
Esta decisión ha provocado una gran incertidumbre entre los más de cinco millones de clientes de Sura, especialmente tras el desmantelamiento de otras nueve compañías de seguros de salud desde 2022.
También ha generado preocupaciones de que el éxodo de Sura pueda alterar todo el sistema de salud del país.
El sistema de salud actual de Colombia se remonta a 1993 con la Ley 100. En él se establecieron Entidades Promotoras de Salud (EPS) como intermediarias entre los ciudadanos necesitados de atención y el gobierno.
Entre sus responsabilidades, las EPS están: contratar hospitales, clínicas y laboratorios; ciudadanos afiliados al sistema de salud; gestionar y entregar medicamentos y tratamientos; y llevar a cabo la gestión del riesgo de enfermedades.
Esta ley también estableció los regímenes contributivo y subsidiado. El primero está dirigido a ciudadanos que pueden pagar una tarifa preestablecida , mientras que el segundo está destinado a la “población pobre y vulnerable” que no puede permitirse participar en el régimen contributivo.
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Antes de 1993, el gobierno estaba a cargo de gestionar los costos de atención médica. Desde entonces, ha asumido un papel más pasivo, pagando a las EPS por los servicios que prestan, haciendo que las EPS privadas administren los fondos de salud pública. Con este sistema, Colombia logró la cobertura universal de salud en 2022 , afiliando al 99,6% de su población al sistema, y comparativamente los colombianos pagan los menores gastos de bolsillo en salud de la región latinoamericana.
Colombia Sura
Sura EPS se integró al sistema en 1995 y se ha convertido en una de las prestadoras de servicios de salud más reconocidas del país. En 2022, fue calificada como la mejor EPS en régimen contributivo por Cuenta Alto Costo, institución gubernamental encargada de informar sobre la calidad de las EPS.
Sin embargo, la presidenta de Sura, Juana Francisca Llano, afirmó que “es histórico y estructural el inadecuado financiamiento de nuestro sistema, dentro de un marco judicial que brinda cobertura ilimitada y servicios con un presupuesto limitado”.
La crisis dentro de Sura se agudizó por el traslado masivo de usuarios de las empresas intervenidas y liquidadas a las pocas restantes, según Llano. De hecho, el gobierno nacional tomó el control de otras dos importantes aseguradoras apenas el mes pasado (Sanitas y Nueva EPS), alegando que no cumplieron con los criterios gubernamentales para una atención adecuada.
Esto también llega en un momento en que el Senado se negó a aprobar la reforma de salud del presidente Gustavo Petro, que busca dar marcha atrás en la Ley 100 y convertir al gobierno en un proveedor directo de atención médica una vez más.
Las compañías de seguros han estado afirmando que el gobierno está transfiriendo menos por usuario de lo requerido y no paga la deuda acumulada . La propia Sura reclamaba más de 221.000 millones de pesos colombianos (aproximadamente 57 millones de dólares), con un patrimonio técnico de -144.300 millones de dólares y un déficit de 163.000 millones de dólares (aproximadamente 42 millones de dólares).
Sin embargo, el gobierno argumenta que las aseguradoras han recibido transferencias pendientes de administraciones anteriores, por lo que ya cuentan con los fondos que dicen adeudar.
Denis Silva, portavoz del movimiento social Pacientes Colombia , afirmó que ambas opciones son ciertas. “Creemos que hoy existe una enorme crisis dentro del sistema de salud debido a la falta de financiación y liderazgo. Sin embargo, también conocemos a los responsables de esto”.
De todos modos, Sura propuso un Programa de Desmonte Progresivo como una forma de salir del sistema de manera coordinada y controlada.
