En 2020 hubieron 13.654 terremotos de magnitud 4 o superior. El 90% de todos los terremotos y el 81% de los mayores ocurren en el Anillo de Fuego del Pacífico, que alberga el 75% de los volcanes activos del mundo.
Terremotos 2020
En todo el mundo, hubo 13.654 terremotos de magnitud 4 o superior en 2020, el más fuerte de los cuales se registró en los EE. UU.
Alrededor de 500.000 terremotos, menores o mayores, ocurren en la Tierra cada año, alrededor de 100.000 de los cuales se sienten, mientras que alrededor de 100 causan daños.
Según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), el terremoto más severo ocurrió en el estado estadounidense de Alaska, el 22 de julio de 2020, con una magnitud de 7.8.
Los expertos del USGS dicen que la razón por la que se registran más terremotos hoy que en el pasado es porque reciben más datos de estaciones sísmicas con el desarrollo de la tecnología.
En 1931, había 350 estaciones sísmicas en la Tierra para registrar terremotos, pero hoy esta cifra se expresa en miles.
Los terremotos se dividen en tres categorías: terremotos tectónicos, volcánicos y de colapso según su formación, mientras que los temblores tectónicos se destacan como el tipo de terremoto más destructivo en términos de severidad y magnitud.
Los movimientos en las fracturas llamadas fallas en la corteza terrestre constituyen casi todos los terremotos que ocurren en todo el mundo.
Herradura
El cinturón de terremotos del Pacífico, también llamado «Anillo de fuego del Pacífico», es conocido como el cinturón de terremotos más intenso, en el que ocurren el 90% de todos los terremotos en todo el mundo y el 81% de los mayores.
El «Anillo de Fuego del Pacífico» de 40 kilómetros de largo (alrededor de 25 millas), con forma de «herradura», se extiende por los bordes de la Cuenca del Océano Pacífico y también contiene alrededor del 75% de los volcanes activos.
En 2020, siete de los nueve terremotos mayores con una magnitud de 7 o más ocurrieron en esta área.
Un terremoto de magnitud 9,5 en 1960 en la región de Valdivia de Chile es el terremoto más destructivo jamás registrado hasta ahora.