Jóvenes en Colombia, motor de la protesta ante futuro incierto

Jóvenes en Colombia, motor de la protesta ante futuro incierto. Miles de jóvenes y estudiantes universitarios han estado al frente de las protestas antigubernamentales de Colombia durante más de dos semanas.

Jóvenes Colombia

Se han llevado la peor parte de los gases lacrimógenos y los disparos de las fuerzas de seguridad, y decenas de ellos lo han pagado con la vida.

Los hombres y mujeres jóvenes se han convertido en las voces de los colombianos hartos de un gobierno que, según dicen, ha manejado mal la pandemia de coronavirus y ha aplastado las esperanzas de un futuro mejor.

“En gran medida, descubrimos que no había miedo a la muerte. A veces es lo único que queda cuando el sistema nos está matando de hambre y no hay oportunidades ”, dijo Yonny Rojas, estudiante de derecho de 36 años que también dirige comedores populares en una de las zonas más pobres de Cali, la ciudad donde la respuesta del gobierno ha sido especialmente violenta.

Los estudiantes no comenzaron las manifestaciones, que estallaron el 28 de abril cuando los sindicatos llamaron a la gente a las calles después de que el gobierno del presidente Iván Duque intentara aumentar los impuestos a los servicios públicos, combustible, salarios y pensiones, exprimiendo efectivamente a la clase media. Esa protesta atrajo a decenas de miles de personas en toda la nación sudamericana.

La administración retiró la propuesta cuatro días después, pero no fue suficiente para sofocar el descontento que había hervido durante la pandemia. La ira aumentó con los informes de brutalidad policial, muertes y desapariciones de manifestantes.

A pesar de más de medio siglo de conflicto civil casi constante entre el gobierno y los rebeldes de izquierda, Colombia se encuentra entre las naciones más ricas de la región, con uno de los niveles más altos de educación universitaria en América Latina.

Pero está plagado de una profunda desigualdad y violencia, por poderosas organizaciones de narcotráfico y grupos paramilitares a los que se culpa de desplazar a cientos de miles de personas de sus tierras, y por asesinatos de activistas sociales y laborales a una escala nunca vista en otras partes del hemisferio.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *