Reservas de litio en Sudamérica, qué hace Chile, Argentina y Bolivia. Sudamérica es el hogar de una verdadera mina de oro. La región fronteriza compartida por Argentina, Bolivia y Chile -conocida como el triángulo del litio- posee algunas de las reservas más grandes del mundo. Aumenta su importancia a medida que la demanda del «nuevo petróleo» mundial crece. Sin embargo, una serie de riesgos políticos y regulatorios, así como también impedimentos logísticos, obstaculizarán el desarrollo del litio en el área. El único país que se beneficiará plenamente de las riquezas podría ser Chile.
Reservas de litio
La política representa uno de los riesgos principales en el desarrollo del litio de América del Sur. Las elecciones presidenciales se realizarán el próximo año en Argentina y Bolivia. Mauricio Macri y Evo Morales respectivamente buscarán la reelección. El líder argentino se enfrenta a una dura batalla, especialmente a medida que su capital político decae debido a una crisis cambiaria que lo llevó a firmar un acuerdo impopular con el Fondo Monetario Internacional.
La administración de Macri logró implementar una serie de reformas de liberalización económica, que incluyen el fin de las restricciones de divisas y una reforma tributaria que hizo que Argentina sea más atractiva para el capital extranjero. Sin embargo, la impopularidad de las reformas del presidente podría catapultar a un populista al poder, dando paso a una mayor intervención estatal en la economía. De hecho, Macri anunció un plan de ajuste fiscal más estricto que obligará al gobierno a recortar aún más el gasto público y negociar aumentos salariales más bajos con los sindicatos.
En Bolivia, Morales también está perdiendo popularidad, pero tiene razones para sentirse confiado de otro período presidencial, debido a las divisiones entre sus oponentes. La amenaza de nacionalización y la fuerte intervención estatal permanecerán si Morales logra la reelección, una posibilidad que podría desalentar a los inversionistas extranjeros interesados en las reservas de litio del país. De hecho, las compañías extranjeras que buscan invertir en la industria boliviana del litio están obligadas a asociarse con la empresa estatal de hidrocarburos, YPFB.
La política no es el único impedimento para el desarrollo del litio, ya que los desafíos logísticos de exportar el elemento a los mercados internacionales también son considerables.
Entre los tres países en el triángulo de litio de América del Sur, Chile goza de la mayor estabilidad política. Los partidos de ambos lados del espectro político han alternado el control del poder desde el final de la dictadura de Augusto Pinochet en 1990. Ninguno impuso cambios importantes en las políticas fiscales más conservadoras del país. Además, es probable que el presidente de centroderecha del país, Sebastián Piñera, impulse reformas de liberalización económica que podrían reducir los impuestos corporativos del 27 al 24 por ciento.
La política, sin embargo, no es el único impedimento para el desarrollo del litio. Las reservas de litio de Argentina se encuentran principalmente cerca de la frontera con Chile, lo que las aleja de sus puertos en la costa atlántica. Y la falta de acceso marítimo de Bolivia limita su capacidad de comerciar con países fuera de América del Sur. Por lo tanto, a pesar de sus problemas de electricidad y escasez de agua, Chile podría estar mejor ubicado para beneficiarse de la demanda mundial de litio, especialmente porque la proximidad de las reservas a los puertos del Pacífico simplificará las exportaciones a China.