Cecilia Vicuña, artista chilena gana León de Oro en Bienal de Venecia. La artista chilena Cecilia Vicuña, junto con la alemana Katharina Fritsch, obtuvieron los Leones de Oro a la Trayectoria en Bienal de Venecia.
Cecilia Vicuña Bienal Venecia
La artista chilena Cecilia Vicuña, con su colega alemana Katharina Fritsch, han recibido los prestigiosos Leones de Oro a la Trayectoria que otorga la Bienal de Venecia.
Ambas artistas fueron elegidoas por Cecilia Alemani, curadora de la 59ª Exposición Internacional de Arte de La Biennale di Venezia. Vicuña y Fritsch estarán presentes en la exposición The Milk of Dreams y recibirán sus premios el día de la inauguración de la Bienal, el próximo 23 de abril.
“La contribución de Fritsch al campo del arte contemporáneo, especialmente la escultura, ha sido incomparable”, dice Alemani en un comunicado. «Ella crea obras figurativas que son a la vez hiperrealistas y fantasiosas: copias de objetos, animales y personas, representados fielmente en cada detalle, pero transformados en extrañas apariciones».
Vicuña es artista y poeta, y ha dedicado años a preservar la obra de muchos escritores latinoamericanos, traduciendo y editando antologías de poesía que de otro modo podrían haberse perdido, dice Alemani.
“Vicuña también es una activista que ha luchado durante mucho tiempo por los derechos de los pueblos indígenas en Chile y el resto de América Latina. En las artes visuales, su trabajo ha abarcado desde la pintura hasta la performance, pasando por ensamblajes complejos. Su lenguaje artístico se basa en una profunda fascinación por las tradiciones indígenas y las epistemologías no occidentales”, agrega.
“Creo que nuestro arte y nuestra conciencia pueden desempeñar un papel en la necesidad urgente de alejarnos de la violencia y la destrucción, para salvar nuestro medio ambiente del colapso inminente”, dice Vicuña en un comunicado. A lo largo de una carrera de 40 años, ha hecho referencia a prácticas antiguas y ha abordado las disparidades políticas, ambientales y de género.
Katharine Fitsch
Alemani describe la primera vez que vio una de las obras de Fritsch en persona en la Bienal de Venecia de 1999 bajo la curaduría de Harald Szeemann. “La enorme pieza que llenaba la sala principal del Pabellón Central se tituló Rattenkönig, el Rey Rata, una escultura inquietante en la que un grupo de roedores gigantes está agachado en círculo con las colas anudadas, como un extraño ritual mágico”.
La escultura se inspiró principalmente en la primera visita de Fritsch a Nueva York en la década de 1980. “El sida se había convertido en una trágica realidad y todo el ambiente del mundo del arte estaba apagado”, recuerda el artista. “Las esculturas icónicas y singulares de Katharina Fritsch juegan con la tensión entre la realidad y la aparición, entre lo familiar y lo surrealista o extraño”, dice su galería White Cube.
