Fondo de emergencia en Amazonía ayudaría a comunidades indígenas. Nativos del Amazonas pidieron a la comunidad internacional que establezca un «fondo de emergencia» de 5 millones para protegerlos del coronavirus y prevenir un «etnocidio».
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«Como pueblos indígenas, estamos en peligro de extinción», dijo José Gregorio Díaz, líder venezolano de la Coordinación de Organizaciones Indígenas de la Cuenca del Amazonas (Coica), que reunió a amerindios de los nueve países que comparten esta región.
Durante una conferencia de prensa virtual, especificó que «solo cinco millones de dólares» eran necesarios para constituir un «fondo de emergencia para la Amazonía», con el fin de ayudar «directamente» a más de 3000 comunidades indígenas, pobre ante el riesgo de contagio
«Si continuamos esperando (una intervención del) estado, moriremos y no queremos desaparecer», dijo Díaz, lamentando que «las políticas sociales de los gobiernos de los nueve países fracasen».
La cuenca del Amazonas tiene al menos 26.500 casos confirmados del nuevo coronavirus, incluidos 1.630 muertos, dijo, y subrayó que el virus «está llegando con mucha más fuerza» a las comunidades indígenas, especialmente a través de la frontera. .
«Estamos aquí para pedir ayuda a la sociedad civil global, a la humanidad», agregó. Más de 500 pueblos indígenas, incluidos 66 en aislamiento voluntario, según Coica, viven en esta región que es compartida Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana Francesa, Guyana, Perú, Surinam y Venezuela.
Pero al menos el 60% de los siete millones de km2 de la selva amazónica se encuentra en Brasil, el país más afectado por el nuevo coronavirus en América Latina.
«El Amazonas representa el 30% de la biodiversidad y el 70% del oxígeno del planeta. Pero su verdadera importancia radica en la interrelación de los pueblos indígenas del bosque para garantizar la vida de todos «, agregó Tabea Casique Coronado, directora de Coica para la ciencia y la educación.
Si no se «preserva esta interrelación, que garantiza en gran medida la estabilidad ecológica, el planeta sufrirá un colapso climático sin retorno», dijo, alertando de un riesgo de «etnocidio».
